domingo, 18 de agosto de 2013

Círculo de Sol

Nunca había guardado de nadie un recuerdo tan celosamente. Acaso un mar de culpa me pesaba, por absurdo, por incoherente. Hace veinte años me enamoré de una niña increíble y, cuando pude decírselo, cuando pude haber vivido algo indescriptiblemente hermoso, mi insensatez de juventud me provocó comportarme de manera poco convencional. El encanto que yo creí haber forjado en ella se fue, de un momento a otro, y no supe, no sé, si lo que pensé y sentí fue correspondido. Pensé en quedarme esa espina en el corazón, para siempre, hasta hoy. Hace un par de meses, como hoy, me desperté a media noche, con sobresalto, aquella vez me fue extraño. Hoy que se el porqué, no me extraña que, al menos, vino a dictarme, entre versos, un perdón que sale de mis dedos.
Dispareja la noche cuando se vive entre dormido y despierto; abro los ojos y quedo disperso entre mi mundo fugaz, pasajero, y el big bang de recuerdos. Habrán sido cerca de diez años de no saber de ti, habrán sido mil historias. No se cómo fue que me recordé de ti esa noche pero algo enmudeció el momento cuando hablaba de cómo me perdí por ti en ese verano hermoso. Es difícil explicar lo que deviene a la mente al escribir así. Autómata, surgen de mí palabras que no son más que consonantes de la razón. Te vi en un halo, así ha sido un par de veces desde que te desprendiste; te vi, simplemente, y mi ensueño me llevó jugando hasta el secreto mismo de los tiempos, al encuentro de la noche con el cielo; te vi, sonriendo, como siempre te recordé, pero sonriendo. En medio del rito y la actualidad, en esa extraña etapa del sueño, habita un contacto entre lo que se vuelve consciencia y lo etéreo. Ahí te encuentro, dorada, frágil, como recorriendo el camino entre lo que se piensa y lo cierto; como si aquello que te da la noche fuera más que imágenes vivas, como si en verdad me trajeras vida por andar viniendo. No sé que mensaje me traes pero sé que por ser tuyo es bueno. Me perdí en la memoria y tus ojos dijeron que todo bien, que todo hermoso, que esto es solo para festejar el eterno retorno de tu recuerdo. Existe una brecha entre la ilusión y el suelo. Recordar es volver a vivir pero soñando se rompe la barrera entre el espacio y el tiempo. Son tus movimientos un elíxir en mi mente que me hace conocer que, entre dormido y despierto, puedo contactar cada minuto de cada uno de tus recuerdos. ¡Vives!, ¡linda! Vives mientras quienes gozamos de tu compañía celebremos tu memoria. Ven, ángel, cuantas veces quieras. Ven a decirme, a tu manera, que la vida se vive una sola vez, gozosos y enteros. Ven, construye mi sueño.

sábado, 26 de febrero de 2011

Trésor



Tú. Cuando pueblas mi mente. Tú. Hoy que sabes lo que eres en mi vida, para mi...

Cada palabra fue de oro el día que te conocí. Cada momento, una fortuna que guardé para mi. Se me apareció tu vida y tu tiempo como lo que siempre esperé, te me apareciste hecha un ángel y te esfumaste a placer. Tiempo adelante o atrás, porque para vivirte no existe propiamente un tiempo que medir, volviste hecha un rubí; envuelta en un coche rojo, no por nada, nada más porque si. Y una buena tarde de cine y el gourmet vegetariano y lo que tuve que vivir, todas las joyas del mundo y el mejor momento fuiste para mi. No supe nunca decir, no pude encender la vida y lo magnifico que me resultaba, poco a poco, rodearme de ti. No bastó nada que decirte y atrás de una noche apagada, te dejé partir. Aun me dolió en el alma, perdido en el vacío profundo de la inacción, te guardé como el mejor tesoro que podría descubrir.

Entre el sol y el fuego, dando vueltas, me apagué en secreto. Una flor, una vida, más allá de la sinrazón para provocar a lo que me cultiva. Dejé correr el tiempo para aprenderme a perdonar. Dejé que te fueras en el estricto sumum de la felicidad, dejé respirar mi vida para perdonar mi insensato silencio y mi lento despertar. Y cuando todo se apagaba, cuando nada parecía menguar volviste como vida a mi vida y llenaste mi mente al andar. Cada gota, cada encanto en mi vida no hicieron más que desempolvar, en mis manos, en mi vida mi tesoro y mucho tiempo para expresar.

Nada más fantástico que el día que te volví a encontrar, pude descubrirte con palabras y con sueños y con frenesí. Más que por el hecho de mirarte, más que por tus ganas de vivir, develando el tiempo te conocí profundamente y me enamoré, otra vez, de ti. Frágil que te sientes debes saber: eres todo para mi, me significas la paz y el cielo y todo lo que en la vida me puede hacer feliz.

Hoy, entre palabras ajenas, entre un sordo y gutural francés, me llevaste al extremo, no lo pude resistir. Hoy no hice más que develar mi secreto y hacerte ver que me representas todo y más, todo lo que siempre quise ser, contigo, desde que te conocí.

martes, 16 de noviembre de 2010

17-11 (The Lovers Promenade)

17-11

Every year, in my life, there’s a night in which my mind manages to travel through the mist of time. That night, tonight, takes my spirit into a joyful moment, to one of the most precious memories I can treasure, to the very meaning of love and happiness. As I have neither means nor ways to say a simple thank you, let this perhaps, easy journey, to explain what I felt that evening when you became a little more than everything to me. You and me, pictured in that very evening, is the recurring valuable gift that I await for every November the 17th.

No hay mejor historia de amor para la memoria que la primera, la que no se puede olvidar, la que marcó nuestra manera de proceder, de sentir, de saber cuándo es que uno quiere a alguien, cuándo uno quiere sin juzgar. Esta fecha en particular me significa un recuerdo extraordinario, una sed de pasado, de lo elemental. Hoy hace veinte años me sabía verdaderamente enamorado y por ello, simplemente, supe tu vida en la mía como elíxir. Por ese magnífico estado emocional tu vida trascendió y trasciende lo suficiente en la mía como para hacer de unas palabras un sencillo homenaje a esa extraordinaria mujer que eras, por que me supiste llevar de lo llano a lo puramente emocional, me hiciste saber que estar enamorado mueve mi mundo, me llevaste como soñando al sentimiento más auténtico, a lo fundamental. Éstas líneas son para ti, dondequiera y con quien estés, deseando siempre que recuerdes esa tarde como yo lo hago. Por la alegría que me trae tu recuerdo. Veinte años no es nada…

No sé si fue mayo o junio pero me la recuerdo en noviembre por que éste es tu mes y si te es sagrado me es sagrado al fin. Habríamos, a la usanza de la época y atados a las modas siempre pasajeras, intercambiado nuestros relojes un par de días antes. Habríamos gastado la baquelita de los teléfonos, por las horas que pasábamos hablando de cualquier tontería, de lo cotidiano diario, de lo que me representaba quererte tanto, siempre quererte más que a mí. Habríamos quedado en vernos, poco antes del rendez vous, de la gran fiesta, del gentío, de la masa social que nos rodeaba todos los días gritando una historia imposible pero cercana al universo por su carácter irremediablemente fantástico. Por que me era fantástico saberte, me era indescriptible lo que sentía por ti. Habríamos, pues, delimitado la cancha, el terreno, el lugar, no así el momento ni la magia ni lo que se quedaría pendiente, ni lo que podríamos recordar. Habríamos pactado tácitamente no mirarnos sino hasta el final, esperar que los momentos de socialización se comieran la tarde y al mundo y a las miradas poco amenas que tendríamos que soportar. Habríamos hecho tantas cosas que no hicimos por que era mejor mirarnos, pensarnos y saber que alrededor giraba un mundo pero en su centro giraba el más profundo de los enamoramientos, el mío, el nuestro quizás. Por que te sabías la dueña de un universo, el tesoro más sagrado de un corazón embriagado de ganas de amar, de una mente intranquila, deseosa de pensarte más horas de las que tuvieran los días, de un corazón bombeando sangre destilada en tu eterna estampa en sí tatuada por el mero hecho de haber encontrado nuestros karmáticos caminos. Causa y efecto, al fin, algo pasó esa tarde que te grabó en mi alma y cada que toco esa cicatriz devengo en lo indescriptible, lo pujante de un chavo de quince años descubriendo lo más grande que se puede sentir en la vida, descifrando un carácter, desprendiéndose de su propio orgullo sólo por amar a alguien más allá de lo que se puede, propiamente, amar.

Nos encontramos cerca de las tres. Quise encontrarte antes por que me desparramaba por decirte lo magnífico que me resultaba saber que me casaría contigo tantas veces como fuera necesario, ese día o todos los días que sobrevinieran al idilio, al estado de infatuación que vivía. Quise encontrarte antes pero me demoré escogiendo la colonia que hube de vaciarme para tener un olor inolvidable, la chamarra que me guardara de la lluvia y que pudiera abarcarte al abrazarte, mis mejores jeans, camiseta blanca y botines; me tardé en peinarme, en fumar un cigarro a escondidas, en caminar hasta la escuela, en saludar a los amigos y en recorrer los puestos, analizando con sumo detenimiento el proceder de quienes habrían de atestiguar la más benigna de mis tardes. Sabía bien que me guardaría esa tarde en lo más profundo de mis sentimientos y la preparé divina por que así acabó siendo. Te encontré casada, como en tu cuarto matrimonio, con demasiados muñequitos de peluche que tus maridos te habían regalado, te invité tu divorcio y te rogué, tantas veces como fue necesario para casarnos, te resististe, te molestaste, te carcajeaste de todas las ocurrencias que te contaba y fue tanto lo que nos divertimos en el jaleo de los amoríos que después de un algodón de azúcar y unos vasitos de insípido ponche de cubeta, te quitaste todos los anillos, me miraste como nunca nadie me había mirado y me llevaste al registro civil para casarnos. Y nos casamos, de mentiritas, de kermesse. Y me sentí soñado. Pero se trataba de juzgar y jugar, se trataba de divertirse y entre broma y broma tus amigas te hicieron coco-wash y nos divorciamos, y nos carcajeamos por saber que todo era un contrato de adhesión bizarro. Y nos volvimos a matrimoniar y nos acabamos mi dinero en los juegos de azar y pedí prestado. Se nos volaba la tarde en la fila de los pepinos enchilados, los sándwiches, las espiropapas y los algodones de azúcar. Y te supe para siempre en mi corazón.

Nos guardamos de la lluvia al caer la tarde-noche. Asimilamos el tiempo y nos abrazamos. Saqué de mi bolso a hurtadillas un paquete de cigarros y fumamos, escondidos, a sangre y fuego que compartimos, reíamos tanto que de un momento a otro no supimos que hacer por decirnos hasta el hastío lo mucho que nos pensábamos que terminamos abrazados. Te regalé un cassette que te había preparado con las canciones que tanto gustábamos, con los temas que de sólo escucharlos te me vienes a la mente, a la fecha, como recuerdo sagrado. Tomaste mi mano, con fuerza, como queriendo no desprenderte nunca de ella. Te juré amor eterno, te dije el cielo y más y te hice poema. Cuando al fin cayó la lluvia, tu y yo abrazados. Habrá sido cosa de una hora sin saber cómo seguir sino cerca de nuestros labios. No sabes cómo, ni cuánto, quise besarte pero apenas nuestros labios se rozaron escuchaste tu nombre, a la distancia, y saliste corriendo en la lluvia y me quedé helado.

Esa noche caminaba, ensopado por la lluvia, hacia mi casa; me detuve en la papelería de la esquina y compré un cuaderno. Lo llené de palabras que trataban, de alguna forma, de explicar lo que se me quedó de ese día y tantos otros que vinieron a nuestras vidas. Lo llené de mis mejores versos, de los más emotivos encuentros. Esa tarde, en que nuestra escuela se convirtió en gozoso promenade, se guardó en mi mente, se escribió en mi alma. Esa tarde me regaló el saber que por ti me llegó el don de la palabra.

No sé cuándo fue la última vez que nos vimos. Quizás eras tu en una vía de servicio de una caseta de la carretera de Guadalajara, ésos ojos no se pueden olvidar. No importa acaso. Tu recuerdo para mí es más que una kermesse o un segundo o un encuentro casual. Tu recuerdo vive enmarcado dentro de mi definición del amor y eso es lo más importante. Brindo buenos minutos de todos mis 17-11 para ti.

As hollow as it may be, as shallow as it will be read, this insightful journey remains the most expected and treasured memory I can hold. I still keep my promise, that one of calling you (now in my memory) every single year. Let this be your birthday present.

lunes, 1 de noviembre de 2010

Night Jessamine


Ella llegó y me despertó, arropada en nocturno perfume, me recordó lo que quiero saber de la noche y en simple español confesé la tragedia pero no la curación.

“Días de incendio los que viví. No los he de contar. No los voy a sufrir. Sufrí al calcinarme, ante supina ignorancia, ante la más salobre salación, ante un deseo irrestricto de contagiar la desgracia; entre llamas y fatua sinrazón. Venido de pronto, repentino, fuego mortal encendió mi alma y la consumió por recuerdo, por semejar paz, por infamia; fuego amigo, fuego al fin, morí en los fuegos de Torquemada creyéndolos salvación.

Ya polvo, abrí mi mente para encontrar mi retorno, millares de piedras formadas frente a mi, en la muralla divina donde te conocí, de mañana, respirando profundo para revivir. Místico bastión, lugar de dioses, en plena altura me hizo mirar redondo para encontrar una nueva armazón. Nada había cambiado desde que te conocí, nada del tiempo fue malo por que aprendí a existir. Del polvo tomaste mi vida para revivir. Y en mis manos las tuyas y la paz llegó; y sé lo que quiero; y en el cielo el conejo y lo busca el girasol. Hueledenoche, perfuma la propia forma de pedir perdón. No soy yo quien lo cuenta sino una canción. Sólo soy yo quien revive por que soy de cenizas de amor. Espiritual, enciendes con palabras y emoción. Ven y toca mi alma y haz de mi un corazón que bata a tu ritmo, a la par de tu pulsación. Tócame con palabras, ármame de tu perfume y enciéndeme alado como ave Fénix, como ángel volador.“


Ahora aspiro profundo y vive en mi mente; en recuerdo, un perfume, en mi espíritu su explosión.

lunes, 4 de octubre de 2010

Grácil


Entre piedras rojas y plafones austeros, entre falsos muros, en falsos recelos; en un mundo obscuro, en volátil cuerpo, éxtasis en silencio, dominio y asiento. Para cuadrar el viento expongo demencia y los daños que embrujan por narrar deseos. Sin embargo, mido mis impactos y excuso mi objeto gritando al cielo, ¿cómo no estás tu para cambiar mi tiempo?, ante nuevas calzas arrepiento en serio por volver en brillos, por cambiar mi tiempo; en motivos claros se profesa en velos y contemplo al aire erosionar mis sueños, meditando a ciegas te veré en mi alma con tus ojos bellos, rozarás mi espíritu al tornar mi derredor, -gozando en vuelo-, y te darás un tiempo al escuchar mis versos que no son más que reflejo de tu grácil conducta y de tu ser entero.

lunes, 20 de septiembre de 2010

Reincarnation


Friend or foe?, I Don’t know. Friendly fire show itself in a deadly fashion. Now, as I recall, everything came as no surprise for my former self. I just standed right there, expecting the truth and an explosion of silence threw my soul to the unknown. Suddenly, my body arise from what once was the most beautiful fantasy ever to be imagined. Every part of it was intact, but my heart. Nonchalance shrapnel tore through my chest and pulled it apart. Silence, my love, silence has many opportunities to pierce anyone’s vital organs.

Dejo ir para perdonar mi alma. Brindo paz, ciego amor, regalo la nostalgia. Lo perfecto que tomó forma humana se humanizó. Quedaron la noche y los párpados para revivir lo magnífico que fue y pudo ser.

Dejo ir y me quedo lo extraordinario, lo que por constante alegría es para los demás inimaginable. Queda mi mente, nada más y lo que en ella endulzaste, queda un juego de espíritus indescifrable. Indescriptible por perfecto.

Cuando esta noche se apague con la silente fiesta de la nocturnidad, cerraré mis ojos para perdonar al tiempo que nos confundió, que no supo distinguir entre el idilio y el momento. Nada de lo que pasó fue incorrecto, son reacciones buenas y malas, unas del alma y otras del cuerpo. Y el cuerpo nunca calla por que necesita aliento y si se acaban sus fuerzas las reclama al viento.

Eso que viste muerto, eso no soy yo, es un fardo que tomó mi forma en secreto. Es el apego y el destiempo, es la vida muerta que quedó cuando se acabó el sueño. Yo me desprendo y recurro en nueva vida y nuevos ejemplos. Me dejo llevar por el camino que siga el perfume de la felicidad y los mejores recuerdos. Egoísta que soy, me llevo en el alma lo mejor de cada vida y lo guardo muy dentro.

Dejo ir por que la paciencia despierta.

Nada que perdonar ni decir cuando se queda en el alma lo bueno.

Dejo ir. En paz. A tiempo.

Sudden soul search ended up in the death of the dialogue. Love was freely given as the gift of concientious freedom. Any sort of afterlife that may arise will bring back every joyful moment of this brief encounter. Love may not come back. Now, as I let go, I find everything as a certain path to my body’s debris. What was deadly shrapnel is now merely dust in the ground, pellets in the playground. There’s nothing but a heart to be recovered. Friendly silence spreads my wings!

domingo, 12 de septiembre de 2010

Renuncia


Llegó confuso y lanzó su historia al vacío. Esa y varias otras tardes renació. Y como revivió, tomó palabras de todos los universos y cada vez que abrió los ojos, todos los idiomas leyó, todos, menos los de un corazón que de antemano lo mató. Recurriendo, murió a latidos como por redundante error; tantas veces como vidas vivió, la tragedia del corazón lo encontró, lo empujó al vació, lo balaceó; lo mató por costumbre tantas veces que la misma constante replicó deforme, tanto como el reencarnó.

Supo derretir su alma tantas veces como murió, porque murió con cada palabra, con cada silencio y hasta por la sinrazón; murió con el tiempo y con la ausencia y con cada esquivo momento; pero todas esas veces murió de amor.

Antelando a la tarde aciaga de un sarcástico reencuentro, a sabiendas de su disfuncional circuito, optó por retar al destino, prefirió recrear algo diferente, degradante acaso, y de golpe se suicidó.

Sólo la noche sabe si esa muerte lo perdonó…
http://www.youtube.com/watch?v=UjUmQRrPN9I